Desde niño he soñado con viajar al espacio. Podría ser un astronauta o simplemente un viajero a través de sistemas estelares. En mi infancia no había tantas series de televisión sobre el espacio, tenía que inventármelo todo y fantasear. Con la llegada de muchas series de televisión y películas, mis sueños se han vuelto más vívidos y coloridos. Inspirado por el cine moderno de ciencia ficción, me pregunté: ¿cómo actuaría yo en ésta o en cualquier otra situación compleja y mortal? Ataques alienígenas, aterrizaje en planetas alienígenas, ataque de inteligencia artificial, ataque de nanitos o virus, despresurización de una parte de la nave, rotura de un elevador entre las cubiertas de la nave, etc. Al fin y al cabo, es una situación mortal y de alguna manera hay que sobrevivir, ¡en el espacio!
Así que decidí crear un simulador de pruebas espaciales. Tras unos meses de trabajo, quedó claro que una atracción así bien podía hacerse y que resultaba aterradoramente interesante. Acabo de dibujarlo y ya tengo ganas de visitar yo mismo una atracción así. ¡Es increíble! Después de escribir unos 40 escenarios de juego, poco a poco empecé a darme cuenta de que la atracción se había dividido en dos soluciones técnicas diferentes. Así nació la idea de la segunda atracción, que difiere en su realización técnica.
El potencial de las atracciones es realmente alto. Puedes apuntarte al juego individualmente o en grupo de hasta 6 personas. Cada jugador se registra con un chip de identificación individual y se personaliza con puntos de éxito especiales que se acumulan en cada misión. Si los participantes juegan en grupo, reciben una bonificación de su líder (comandante). Un jugador con mala reputación en el equipo, tendrá un efecto negativo en todo el equipo. La realización de las pruebas puede retransmitirse en línea. Las clasificaciones se forman tanto individualmente como por equipos: 2 tripulantes, 3 tripulantes, 4 tripulantes, 5 tripulantes, 6 tripulantes. Para resolver la tarea de la misión, es necesario enviar un miembro de la tripulación por especialidad: un médico – cura, un piloto – calcula con mayor precisión el curso, un ingeniero – mejor equipo de reparación, un científico e investigador – mejor reconocer la amenaza.
Ambas atracciones no son fáciles de crear. Requiere un espacio no pequeño, una ingeniería de implementación competente, programadores expertos para escribir guiones y análisis de seguridad. Las atracciones están diseñadas de tal forma que pueden modernizarse y ampliarse en cualquier momento, incluso en el momento de su funcionamiento, sin necesidad de reescribir el código y reconstruir los módulos de atracción ya instalados. Todos los módulos están conectados entre sí por una fuente de alimentación y un bus de datos que está conectado al servidor principal. Tras la modificación, el software especializado se adapta automáticamente para generar el escenario correctamente. La modularidad de las atracciones permite numerosos cambios en la configuración del entorno de juego. El servidor utiliza una red neuronal especializada y aprende de las misiones completadas para hacer modificaciones de cara a las siguientes. Temporizadores, constantes, diálogos, mensajes, tareas, soluciones, puzles, aleatoriedad y mucho más, en constante cambio. Las misiones tienen múltiples vías de resolución e interacciones, pero a veces el curso de acción del jugador o del equipo, conducirá a un fracaso repentino y los puntos de éxito se anularán.
Aunque lo anterior suena muy bonito, realizar una atracción así requiere no pocos esfuerzos y recursos.